
Establecida como prioridad transversal en la Estrategia de especialización inteligente de Canarias, RIS3 ampliada, la sostenibilidad se presenta como uno de los grandes desafíos para el conjunto de nuestro territorio. Así, se destaca que el modelo de crecimiento económico actual debe evolucionar hacia un modelo de crecimiento regional más sostenible, con un impacto neutro de su huella de carbono y protegiendo los recursos disponibles, especialmente los recursos hídricos. En este contexto, dadas las características de Canarias (territorio insular, impacto del turismo, densidad de población) lograr esta transición es crucial para el crecimiento, la competitividad, el empleo y el bienestar de nuestra comunidad.
Por otra parte, Canarias cuenta con unas capacidades ideales para servir como lugar de investigación, desarrollo y ensayo de tecnologías verdes (desalación, depuración y regeneración de aguas, generación, gestión y almacenamiento de energías renovables, valorización de residuos). La capacidad diferenciada de Canarias se basa en unas condiciones ambientales y climáticas excelentes para el desarrollo y testeo de tecnología en condiciones reales (sol, viento, geotermia, saltos de agua y potencial marino) y la existencia de entornos protegidos ideales para el desarrollo de acciones piloto.
Todo ello, junto al alto potencial para el desarrollo de la economía circular que tiene Canarias, hacen necesario impulsar el desarrollo de las energías renovables o la incorporación de la sostenibilidad en los hábitos de vida y en los procesos productivos.