La Administración de Consumo, a través de sus servicios de inspección, desarrollan las actividades de control de mercado dirigidas fundamentalmente a:
La inspección no solo tiene un fin sancionatorio, sino que cumple una función preventiva. Por otra parte, la actividad inspectora obliga a nuestras empresas a competir en el mercado bajo el estricto cumplimiento de la normativa básica de consumo en productos y servicios, de modo que colabora con la mejora de la competitividad ayudando a eliminar la competencia desleal que ejercen aquellas empresas que comercialicen productos o servicios sin ajustarse a norma alguna.
ver el artículo 30 de la Ley 3/2003, de 12 de febrero ( B.O.C. del Estatuto de los Consumidores y Usuarios de la Comunidad Autónoma de Canarias)
ver el artículo 39 de la Ley 3/2003, de 12 de febrero ( B.O.C. del Estatuto de los Consumidores y Usuarios de la Comunidad Autónoma de Canarias)